En el proceso de elaboración de la cerveza artesanal, la mayoría de los países del mundo utilizan accesorios de cereales para producir cerveza. Los accesorios de cereales se refieren principalmente a granos sin maltear, azúcares y siropes. La selección de estas maltas especiales, maltas de trigo y otros sustitutos no sólo ayuda a reducir los costes de producción, sino que también mejora el sabor de la cerveza. La selección de los cereales accesorios debe adaptarse a las condiciones locales, teniendo en cuenta los recursos locales y los precios de mercado. Deben preferirse los cereales ricos en almidón (como cebada, trigo, maíz, arroz, mijo, soja, etc.) y los azúcares o jarabes. Es necesario asegurarse de que se añaden sin aumentar la dificultad de filtración y sin afectar al sabor, la espuma y el color de la cerveza.
El uso de azúcar o jarabe como materia prima auxiliar no sólo puede aumentar el rendimiento del mosto, sino también ajustar la proporción de azúcar en el mosto y mejorar el grado de fermentación de la cerveza. El contenido en proteínas y polifenoles fácilmente oxidables de los accesorios de cereales es mucho menor que el de la malta, lo que contribuye a reducir el color de la cerveza, optimizar su sabor y mejorar su estabilidad no biológica. Además, la adición de ciertos accesorios de cereales (como el trigo) también puede aumentar el contenido de azúcar y proteínas en la cerveza, mejorando así el rendimiento de la espuma.
Siguiendo el proceso de elaboración tradicional, la proporción de adición de accesorios de cereales suele controlarse entre 10% y 50%, y esta proporción se ajustará en función de los hábitos de consumo, los tipos de cerveza y los requisitos de calidad de los distintos países y regiones. Los accesorios de cereales añadidos deben garantizar la producción de productos de fermentación normales durante el proceso de elaboración del mosto para satisfacer la búsqueda de calidad de la cerveza por parte de los consumidores.
En general, el uso de accesorios de cereales pretende utilizar granos asequibles y ricos en almidón como complemento eficaz de la malta, aumentando así el rendimiento del mosto, reduciendo los costes de las materias primas y maximizando los beneficios económicos.